Los mosquitos o yo: es la guerra

El aumento de la temperatura a consecuencia del cambio climático incide directamente en la proliferación de los insectos.

Es Eco, es Lógico

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En el caso de los mosquitos, muy molestos en esta época del año, esto supone un incremento en el número de ejemplares pero también en la cantidad de zonas que reúnen las condiciones climáticas de calor y humedad que les son favorables.

Se estima que existen más de 3.000 especies de mosquitos, aunque en España sólo hay 54 especies ‘controladas’. El más extendido es el Culex pipiens, el mosquito común.

En los últimos años, además del mosquito común, se ha incrementado la presencia en nuestro país del mosquito tigre, el Aedes albopictus. A diferencia del resto, este mosquito pica no sólo por la noche, sino también durante el día. Sus picaduras son dolorosas y pueden provocar reacciones alérgicas. Es una especie invasora procedente de Asia que se lleva extendiendo en Europa desde los años 80.

SABÍAS QUE...

Pueden volar a una velocidad de entre 1,6 y 2,4 km/h.
Baten las alas entre 300 y 600 veces por segundo.
Detectan el CO2 que exhalamos desde una distancia de hasta 30 metros.
La mayoría no se aleja más de 1,5 km de su lugar de nacimiento.

Tanto en el caso del mosquito común como en el caso del tigre, son las hembras las que pican, ya que se alimentan de la sangre de otros animales, mientras que los machos de la especie se alimentan de néctar. Precisamente las hembras son las que tienen un ciclo vital más largo, hasta cerca de un mes, mientras que los machos suelen vivir en torno a una semana.

Las larvas de mosquito están en casi cualquier masa de agua que se encuentre estancada durante, al menos, una semana al aire libre: pantanos, canales, charcos, riberas de ríos, costas, agujeros de árboles, cisternas y todo tipo de recipientes. No es necesario que haya una gran cantidad de agua, con un centímetro de agua pueden completar esta etapa.


INSECTICIDAS DOMÉSTICOS

Cada insecto requiere un tipo de insecticida concreto. La elección se debe adecuar al espacio en el que lo utilicemos: exterior, interior, vivienda con niños, con mascotas... 

 Aerosoles: son muy eficaces para un uso instantáneo, pero se recomienda mantener las ventanas abiertas durante su utilización o bien salir de la estancia para evitar una concentración excesiva del producto.

 Eléctricos (pastillas o líquido): funcionan conectados a la corriente eléctrica. Estos difusores son de los más utilizados en los hogares, sobre todo, en los dormitorios.


REPELENTES

Es recomendable leer la tabla de ingredientes del producto para saber su composición exacta. Algunos protegen durante muchas horas y otros son de corta duración. La elección depende de la especie del mosquito (sobre todo, si viajamos a climas tropicales) y de la persona que usará el repelente, edad y tipo de piel.

 Lociones, cremas, aerosoles: se aplican directamente sobre la piel. Suelen tener una duración de entre 4 y 6 horas..

 Naturales: velas, plantas o pulseras son algunos de los soportes de los sistemas antimosquitos basados en plantas, como la citronela, la albahaca o el eucalipto.
 



POR QUÉ PREFIEREN UNAS "VÍCTIMAS" A OTRAS

• Sangre: prefieren el tipo O.

• Calor: la ‘víctima’ más atractiva es la de mayor temperatura corporal.

• Dióxido de carbono: las personas que emiten más CO2 los atraen. Esta atracción es muy notable durante el embarazo, una etapa en que se genera más dióxido de carbono y se tiene una temperatura corporal más elevada.

• Sudor: detectan sustancias como el colesterol o el ácido úrico que segregamos con el sudor.

• Piel: a menor vello y menor espesor de epidermis, más propensa será la persona a la picadura.


CONSEJOS PARA AUYENTARLOS

• Usar ropa de colores discretos y no usar perfume, ambos los atraen.
• Instalar mosquiteras en lugares con elevado riesgo.
• Evitar las luces tenues porque atraen más a los mosquitos.
• Eliminar cualquier estancamiento de agua en floreros, macetas, botes,… Estos lugares son perfectos para la proliferación de mosquitos.
• Secar las zonas de charcos en patios o jardines en las que pueda acumularse agua.