Zumos y néctares, una forma nutritiva de refrescarse este verano

Como acompañante del desayuno o de la merienda, el zumo es una de las bebidas más refrescantes para hacer frente al calor. Gracias a sus vitaminas, antioxidantes y minerales, hidratan el cuerpo muy rápido y son muy nutritivos

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TIPOS DE ZUMOS

En las estanterías del súper podemos encontrar una amplia gama de zumos y néctares que, a simple vista, pueden parecer iguales, pero que están elaborados de maneras totalmente distintas. De hecho, las propiedades nutricionales varían mucho de un zumo 100% exprimido a un néctar o un zumo de concentrado.


• Zumo natural
Es el que todos podemos preparar en nuestros hogares, ya sea de forma manual o con un exprimidor. Este tipo de zumo no sufre ningún tratamiento especial y conserva todos los nutrientes y vitaminas. Es el zumo más beneficioso porque conserva todos los componentes de la fruta.

• Zumo exprimido 100%
Estos zumos envasados son los más parecidos a un zumo natural. Se obtienen directamente de las frutas sin procesos de concentración, lo que les permite conservar mejor las propiedades y vitaminas de la fruta. En este tipo de zumos no se suele añadir ni agua, ni azúcar, ni ningún otro ingrediente más allá del zumo de fruta exprimido.

• Zumo de concentrado
El zumo a base de concentrado se elabora exprimiendo el zumo y quitándole, mediante un tratamiento térmico de evaporación, el 85% del agua. La deshidratación se realiza a altas temperaturas y bajo condiciones de presión para evitar dañar en todo lo posible el zumo y mantener sus características. En el momento del envasado, se le añade el agua de nuevo, así como los aromas que se han perdido durante el proceso de concentración. Estos zumos suelen conservarse durante más tiempo.

•  Néctar de frutas
El néctar se obtiene al añadir agua y azúcar al zumo de frutas. En este tipo de bebidas el contenido en zumo natural se sitúa entre un 50% y un 45% y normalmente suele proceder de zumo de concentrado. Al tratarse de una bebida con azúcar añadido, suele tener mucho sabor.

•  Bebidas de zumo y leche
Este tipo de producto se ha hecho cada vez más popular, sobre todo entre el público infantil, ya que se mezclan las bondades de la fruta y leche y además contienen vitaminas. Pero hay que tener en cuenta que no equivalen al consumo de una fruta fresca y un vaso de leche.

•  Refrescos con zumo, aguas aromatizadas
Cada vez más de moda, el porcentaje de zumo que lleva este tipo de bebidas es muy bajo, apenas ronda el 10%, por lo que no se le puede considerar como un zumo, sino más bien como un refresco.


EL ZUMO NO SUSTITUYE A LA FRUTA

Siempre será más sano y nutritivo tomar fruta fresca entera, incluso antes que un zumo recién exprimido.

• La fruta fresca tiene un alto contenido en fibra que no conserva de igual manera el zumo.
• Con menos cantidad de fruta nos saciamos antes, con lo que consumimos menos calorías.