¿Cuántos tipos de miel existen?

La miel es considerada como un antibiótico natural por sus múltiples propiedades medicinales que provienen de su origen.  La miel procede mayoritariamente del néctar de las plantas, recolectado y transformado por las abejas. 

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La miel es un producto que ha sido utilizado por el ser humano desde sus orígenes, tanto como alimento, como por su aplicación externa para curar heridas y también como conservante, de hecho, la miel no se estropea. Forma parte de la dieta mediterránea desde la época de los egipcios y, hasta que apareció el azúcar de caña en el siglo XVI, era el único edulcorante conocido.

La miel es beneficiosa para tratar la tos y otras afecciones respiratorias, así como para el tratamiento de alergias, reducción del colesterol, prevención de problemas de corazón y estreñimiento, por sus efectos laxantes.


Tipos de miel

Las podemos agrupar en 2 grandes grupos:

• Miel floral:

- Monofloral: procede del néctar de una única flor.

- Multifloral: está formada a partir del néctar de muchas flores, sin que ninguna tenga más proporción que las otras. Es la miel de sierra, de montaña, de prado, etc.

• Miel de mielada o miel de bosque: no procede del néctar de flores, sino de secreciones de ciertas plantas o animales que las ingieren de las plantas. También se llama miel de rocío o rocío de miel.

Existe una amplia variedad de mieles de distinto color, sabor, olor y textura.

Principales mieles uniflorales:

Miel de romero

De color ámbar claro, al cristalizar o endurecerse, tiene un color blanco. Ayuda a la digestión, evita la acidez de estómago o las flatulencias. Recomendada para resfriados o bronquitis por sus propiedades antisépticas, pectorales y balsámicas. Contiene litio por lo que también ayuda a combatir enfermedades mentales. Para uso externo, se recomienda para tratar cortes o arañazos.

Miel de azahar

De color amarillento, procede de las flores de cítricos, es suave al gusto y posee un perfume característico. Tiene una gran cantidad de azúcares que cristalizan y le dan gran densidad, por eso es más sólida. Tiene propiedades sedantes y relajantes. Se recomienda para tratar insomnio, ansiedad o nerviosismo.

Miel de eucalipto

De color ámbar oscuro, sabor amaderado y olor balsámico. Tiene propiedades balsámicas, expectorantes, antisépticas y antiinflamatorias. Por ello, va bien para prevenir bronquitis, resfriados, faringitis, tos, asma, sinusitis o gripe. También previene la cistitis, nefritis o las piedras en el riñón.

Miel de espliego

De color dorado claro, gran aroma y muy buen sabor. Por su gran contenido en hierro es ideal para tratar la anemia. Sus propiedades bactericidas en uso tópico (externo) la recomiendan para heridas, cortes, quemaduras de todo tipo, incluso solares, o picaduras de insectos. También tiene propiedades antisépticas y mucolíticas, ayudando a prevenir refriados, tos, anginas, faringitis, bronquitis o gripe.

Miel de tomillo

De color oscuro, cristaliza irregularmente. Es antiséptica, digestiva y buena para prevenir o atajar infecciones. Se recomienda para evitar flatulencias, acidez de estómago, diarrea y también para prevenir o tratar resfriados, gripe, anginas o bronquitis. Al ser rica en hierro, también se recomienda para la anemia.

Otras

Brezo, tilo, avellano, castaño, lavanda, acacia o trébol, entre otras. También existen mieles menos conocidas como la de Manuca, procedente de Australia y Nueva Zelanda; de Ulmo o de tiaca de Chile; Quillay de Argentina, Perú o Bolivia…


Principales mieles uniflorales:


Miel de encina

Proviene de la melaza que se desprende de las bellotas. Es una de las mieles más oscuras, a veces hasta negra. Es bastante fuerte aunque tiene buen sabor. Es rica en hierro y tiene propiedades astringentes (combatir diarreas), estimulantes y digestivas.

Miel de abeto

De color verde, es difícil de conseguir porque su producción es bastante escasa y no se produce todos los años. Tiene un aroma balsámico fuerte y se suele utilizar para tratar enfermedades respiratorias.

Miel de pino

Es como la miel de abeto, que se obtiene del mielato que segregan los insectos chupadores de savia que viven en los pinos. Su color es oscuro, tiene un olor característico y sabor como a resina. Resulta difícil de conseguir y también es adecuada para tratar enfermedades respiratorias.