Cocina de aprovechamiento: evita el desperdicio de alimentos en casa

 ¿Qué hacemos con la comida que sobra? Di NO al desperdicio de comida, te animamos a que te sumes a la cocina de aprovechamiento y ahorres tiempo y dinero.

Es Eco, es Lógico

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Se estima que cada año se desaprovechan en el mundo más de 1.300 millones de toneladas de alimentos. En la Unión Europea esta cifra ronda los 89 millones de toneladas, según un estudio de la Comisión Europea de 2016. Más de la mitad de esta comida, el 53%, se pierde en los hogares. Un problema preocupante que podría reducirse mediante cambios en los hábitos de consumo y a través de una mejor gestión de los alimentos.


¿Por qué es importante hacer recetas de aprovechamiento?

La cocina de aprovechamiento, también conocida como trash-cooking, no es más que la cocina que solían hacer nuestras abuelas. No tirar nada de lo que sobra y aprovechar esos ingredientes o esos restos para crear otros platos. Una filosofía que debemos aplicar en nuestro día a día. ¡Con un poco de creatividad conseguiremos reducir el desperdicio en los hogares, al mismo tiempo que elaboramos platos nuevos sin apenas cocinar y ahorrando dinero!


Consejos para elaborar recetas de aprovechamiento

- Sobras de pollo
Si hemos hecho caldo o nos han quedado restos de pollo asado, podemos utilizar las migajas para elaborar croquetas o canelones; otra opción es añadirlas a un bocadillo o un sándwich, acompañadas de hojas verdes. Incluso podemos emplear el pollo para preparar una deliciosa ensalada César. Los restos de esta carne también son perfectos para elaborar tacos y enchiladas.

- Sobras de pescado
Podemos desmenuzar los restos de pescado que nos hayan sobrado retirando la piel y las espinas. Una vez limpio, se pueden aprovechar para elaborar un pastel o pudin de pescado, pero también podemos preparar croquetas, albóndigas, hamburguesas o añadirlas a una sopa. Si nos ha sobrado pescado crudo, podemos aprovecharlo para hacer un ceviche. En el caso del marisco, es ideal para preparar un salpicón con unos cuantos mejillones, un poco de pulpo y algunos langostinos. Solo habrá que añadir cebolla, pimiento y aceitunas negras y un buen chorro de aceite de oliva.

-Sobras de verduras
En ocasiones nos sobra media cebolla o medio tomate que hemos utilizado para un sofrito: antes de que acabe en el cubo de la basura, podemos picarlos y congelarlos para utilizarlos en otra ocasión.  En el caso de las verduras que sobran del cocido, las podemos triturar con un poco de caldo para obtener un rico puré. La patata cocida, la podemos cortar y saltear con un poco de aceite para convertirla en un estupendo acompañamiento. Si nos ha sobrado pisto, podemos añadirlo a una pizza, a unos espaguetis o elaborar empanadillas caseras.


- Sobras de carne
Los restos de un asado o de un trozo grande de carne se pueden cortar en tacos y saltear con verduras y un poco de soja para darle una segunda vida.

- Sobras de fruta
Con la fruta que está a punto de echarse a perder, se pueden elaborar multitud de recetas. Antes de tirarla, podemos hacer mermelada. Solo hay que pelarla, cortarla en trozos, añadirle un 80% de su peso en azúcar y cocerla a fuego lento. En 20 minutos tendremos una mermelada casera para nuestros desayunos o meriendas. Otra opción es congelar la fruta para hacer helado o aprovecharla para hacer bizcochos.  

- Restos de pan y repostería
Con el pan  del día anterior podemos hacer torrijas o migas, y también podemos rallarlo para tener siempre en la despensa pan rallado. Las madalenas o bizcochos que se empiezan a hacer duros se pueden emplear para hacer un pudin.

- Sobras de legumbres
No tires los restos de lentejas o del potaje si te sobran. Simplemente triturando las lentejas o los garbanzos y añadiéndoles un poco de ajo, limón y comino tendremos un delicioso  hummus. Otra opción para los garbanzos es salpimentarlos y meterlos en el horno para obtener un estupendo snack saludable.