Beneficios de comer cerezas

La cereza es un fruto de aspecto globoso, de color rojo más o menos intenso dependiendo de la variedad y su pulpa es jugosa y de color variable (desde el amarillo hasta el granate intenso). Su consumo se remonta a la época de los griegos y romanos, y se extendió rápidamente hasta llegar a España alcanzado un rápido desarrollo. Actualmente la cereza está muy extendida por diversas regiones y países de climas templados e incluso fríos.

En Europa encontramos dos tipos de cerezas de las cuales proceden las aproximadamente 1000 variedades que existen:

- Las cerezas dulces (Prunus avium). Las variedades más comunes son la “ambrunesa”, “burlat  y “napoleón”. Son ideales para consumir de forma natural  o bien elaborar mermeladas y confituras.

- Las guindas o cerezas ácidas (Prunus cerasus), son más pequeñas y se utilizan sobretodo para elaborar licores y salsas para acompañar carnes.

La madera del cerezo es muy decorativa y se utiliza en la fabricación de muebles. Al ser cortada su color es rosado, pero se oscurece rápidamente y, después de algún tiempo, toma un color rojo caoba.

Cada variedad cuenta con unas particularidades, como son una diferente acidez, carnosidad y tiempo de maduración. En España destacan en producción, las provincias de Alicante, Castellón, Barcelona, Zaragoza, Navarra y la comarca del Jerte (con denominación de origen) en la provincia de Cáceres.

Los frutos que se obtienen en el valle del Jerte pertenecen en su mayoría al grupo de las picotas, las cuales se caracterizan porque pierden el pedúnculo de forma natural durante la recolección, y engloba las variedades “Ambrunés”, “Pico negro”, “Pico limón negro” y “Pico colorado”, así como la variedad “Navalinda” que conserva el pedúnculo tras la recolección.

Como reconocer la auténtica picota del Jerte:

• La zona donde estuvo el pedúnculo no está dañada.

• Su color es rojo oscuro.

• Tiene el sello de calidad de D.O. de cereza del Jerte.

• Son más pequeñas que las cerezas comunes.

La cereza es una fruta que por su agradable sabor y su vistoso color, se puede utilizar para introducir a los más pequeños en el gusto por las frutas, consumiéndolas naturales o como postres: tartas, mermeladas, confituras, acompañando a helados….

Desde el punto de vista nutricional la cereza aporta pocas calorías (52 cal/100 gramos) y cantidades significativas de fibra, lo que le confiere un carácter “laxante” y depurativo del organismo, así como pequeñas cantidades de vitamina A y C.

Sin embargo, lo realmente destacable de la cereza es su contenido en flavonoides, sobretodo los antonianos que son pigmentos responsables del color rojo de estas frutas. Esta sustancia se encuentra principalmente en la pulpa de la cereza y, además de ser un colorante, presenta una eficaz acción antioxidante que retrasa el envejecimiento celular y la aparición de enfermedades degenerativas.

Elección y compra de las cerezas: es aconsejable elegir aquellas que tengan un color rojo oscuro y que resulten pesadas, de piel brillante, consistencia firme y tallo verde y fresco.

Lo ideal es consumirlas inmediatamente, pero si hay que conservarlas durante más tiempo, se deben guardar en el frigorífico sin lavar ni tapar hasta el momento de su consumo; se pueden conservar también en almíbar.