Marisco para sorprender estas fiestas
Descubre las variedades que existen y sus características, así como las propiedades y beneficios del marisco. Conoce todo sobre el plato rey de esta temporada.
Los frescos
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Tipos de marisco
- Crustáceos: poseen dos pares de antenas, un cuerpo segmentado y extremidades articuladas especializadas. Estas extremidades cumplen diversas funciones vitales, como la locomoción, la alimentación y la reproducción. Entre los crustáceos, encontramos varios tipos de mariscos populares:
- Cangrejos: suelen consumirse cocidos y de ellos se comen las patas, las bocas (pinzas) y el interior del cuerpo central. La carne es delicada y exquisita, pero necesitaremos los utensilios adecuados para romper su dura cáscara y extraer la carne.
- Langostas: son mariscos de gran tamaño, con cuerpo alargado y dos grandes pinzas en la parte delantera. Su sabor es más suave, pero igual de sabroso.
- Gambas rojas: son el crustáceo más utilizado en la zona de Levante para preparar arroces o para cocinar a la plancha. Como el resto de crustáceos, su sabor más potente se encuentra en la cabeza.
- Cigalas: caracterizadas por su color rosáceo, carne prieta y caparazón duro, las cigalas son uno de los productos de mayor tradición gastronómica en nuestro país. Suelen prepararse a la plancha con un poco de sal.
- Moluscos: se caracterizan por poseer un cuerpo blando y, en la mayoría de los casos, una concha dura que los protege. Sin embargo, no todos los moluscos poseen una concha externa visible: sería el caso de los pulpos y las sepias. Entre los más populares, encontramos los siguientes:
- Mejillones: destacan por su intenso sabor a mar y su textura carnosa y suculenta. Su origen está en las aguas frías de los mares del norte.
- Ostras: son famosas por su textura suave y su sabor salado, y son las auténticas joyas del mar. Las ostras son muy nutritivas y una excelente fuente de proteínas.
- Almejas: son muy versátiles en la cocina y podemos prepararlas solas, con una rica salsa marinera o para acompañar otro tipo de platos, como guisos o calderetas.
- Vieiras y zamburiñas: son un manjar muy apreciado en la gastronomía, ya que ofrecen una experiencia culinaria única.
- Calamares: son otro marisco que no podrá faltar en tu mesa, de carne blanca, tierna y jugosa. Con un sabor suave y muy sabroso, son ideales tanto para platos sencillos como para recetas más elaboradas.
- Pulpos: tienen un sabor y textura únicos. Su carne firme, pero a la vez tierna, y su sabor intenso, hacen que sea un ingrediente protagonista en numerosos platos
- Sepias: de la misma familia que el calamar o el pulpo, su versatilidad permite elaborar un sinfín de platos, desde su elaboración a la plancha hasta arroces o guisos.
Propiedades y beneficios
Todos estos mariscos pueden servirse cocidos, a la plancha o como parte de recetas más elaboradas. Su consumo como plato único, en el caso de los crustáceos, es posible porque son mariscos con un sabor muy intenso y característico. Además, algunos de ellos, como las gambas, son muy útiles por su versatilidad: pueden cocerse, guisarse, freírse o hacerse a la plancha.
Además de ser un imprescindible en nuestra cocina, tanto solos como acompañados, aportan numerosos beneficios para nuestra salud.
- Fuente de proteínas: los mariscos aportan proteínas de alto valor biológico, ya que proporcionan aminoácidos esenciales. Por ello, son ideales para dietas que favorezcan la recuperación muscular.
- Bajos en grasa: contienen un nivel muy bajo de calorías y grasas, siendo estas últimas inferiores al 2%. Esto hace que este alimento sea perfectamente apto para dietas para adelgazar, ya que, al ser también ricos en proteínas, producen un efecto saciante.
- Gran aporte de vitaminas: entre las que encontramos la vitamina E, la vitamina A y vitaminas del grupo B.
Ojo con el colesterol
Algunos crustáceos contienen niveles poco recomendables para una dieta baja en colesterol y tampoco son recomendables en personas con hiperuricemia o gota, ya que poseen purinas que se transforman en ácido úrico.