Nacimientos de los ríos Cuervo y Júcar: guía por los ríos de Castilla-La Mancha

¡Te presentamos una magnífica guía por los nacimientos de los ríos Cuervo y Júcar y otros recónditos lugares en este paradero de Castilla-La Mancha!

Viajar con gusto

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Nacimiento del río Cuervo, rutas y cascadas

En plena Serranía de Cuenca se localiza una de las joyas naturales más hermosas de la provincia. Es un entorno único al que se le otorgó el reconocimiento de monumento natural en 1999. Se trata de un paraje de ensueño en el que se ubica una de las rutas más impresionantes de España. Sus saltos de agua y fácil sendero hacen que sea apto para todos los públicos.

Se puede visitar en cualquier época del año, aunque las mejores épocas son en invierno y primavera, que es cuando predomina el agua y se puede disfrutar en su máximo esplendor.

La ruta hasta el nacimiento del río Cuervo comienza en el parking. Se trata de una ruta circular de poco más de tres kilómetros, sencilla y perfecta para hacerla con niños o amigos. Al poco de comenzarla, llegaremos a una zona de descanso con merenderos y algún restaurante. Una vez pasada, iniciaremos la zona habilitada con pasarelas, puentes y escaleras que van introduciendo al viajero en las orillas del manantial hacia el nacimiento.

El paisaje entre árboles que brinda es espectacular y también se puede disfrutar de la zona de las cascadas. A un paso, se encuentra uno de los saltos de agua más grande del lugar (no es el del nacimiento). Pasada la cascada y siguiendo el curso del río llegaremos al nacimiento de río Cuervo. Para ello, se tendrá que dejar atrás un pequeño mirador donde se puede observar la grandeza de estas cascadas. Más tarde, pasaremos una extensa pradera y, siguiendo el camino, llegaremos al nacimiento.

Otras rutas son: el sendero de la Turbera, un recorrido que comienza unos 150 metros antes del nacimiento del río, de un kilómetro y medio de longitud, discurre por una turbera calcárea; la ruta del Pinar, de unos 11 kilómetros, a la que se accede por medio del sendero de la Turbera y permite realizar un recorrido a través del pinar de pino silvestre y maravillarse con las vistas panorámicas increíbles. No obstante, el parque natural de la Serranía de Cuenca contiene 11 rutas aptas para el senderismo y la educación ambiental. Todas están señalizadas y tienen diferentes niveles de dificultad.

Nacimiento del río Júcar

El río Júcar nace en la Serranía de Cuenca, en un lugar conocido como los Ojuelos de Valdeminguete, en el fondo del valle que separa la Muela de San Felipe de la Muela de la Mogorrita, las dos máximas alturas de la provincia. A cuatro kilómetros del pueblo de Tragacete, en el Albergue de San Blas, comienza el sendero que conduce a la cascada del Molino de la Virgen, un precioso salto de agua de unos veinte metros de altura, preámbulo de las maravillas de la cuenca alta del río Júcar.

El Cañón del Júcar

Es un paisaje de vértigo. Entre los municipios de Jalance y Cofrentes, descubrimos el río Júcar, encajado entre enormes paredones de más de 300 metros de altura. Un espacio mágico e impresionante con barrancos, bosques mediterráneos, túneles excavados en la roca… Es un recorrido circular de 33 kilómetros que parte de Jalance y que se puede recorrer en aproximadamente 10 horas, por lo que no es una ruta para todos los públicos, hay que estar un poco entrenado. Se puede hacer un tramo más reducido, de unos 16 kilómetros.

En esta ruta nos toparemos con la cueva de Don Juan, con restos del Mesolítico. Utilizada como habitáculo en la antigüedad y después como refugio de pastores y cazadores, se puede visitar. Se adentra unos 500 metros por el interior de la cueva y se tardan unos 40 minutos en realizar una visita guiada. Se puede acceder al inicio de la ruta con vehículo privado porque hay un aparcamiento en las proximidades.

Se puede admirar el paisaje desde varios miradores: el de Campichuelo, el de los Cañones del Júcar y el de la fuente del Castillo, habilitado con mesas, bancos y una fuente. Otras áreas recreativas de la zona son la de Moragete y cueva de Don Juan, la fuente Bella y la fuente del Tobarro, ya en el municipio de Jarafuel, en la comarca del Valle de Ayora.

Para emprender el camino de regreso tenemos que pasar ineludiblemente por la senda Centenillos, el puente Star, el puente Nuevo y el barranco del Agua. Hay numerosos puntos de interés turístico, entre los que destaca el Aula de la Naturaleza de Moragete y los manantiales del río.

Para los amantes de los paseos fluviales, Cofrentes ofrece la primera ruta fluvial de la Comunidad Valenciana. Se trata de un recorrido de una hora de duración por el río Júcar que parte de esta localidad y tiene como destino Cortes de Pallás.



Descubre la Hoz del Júcar 

Si estás buscando donde hacer tu próxima escapada rural y de aventuras, seguramente en la Hoz del Júcar encontrarás un lugar ideal para pasar unos días marcados por mucha naturaleza y bonitos paisajes.

En el extremo nororiental de la provincia de Albacete se encuentra uno de los espacios más sorprendentes de toda Castilla-la Mancha: la Hoz del Júcar, producto de la acción erosionante de las aguas del río Júcar antes de unir su cauce al del Cardiel a la altura del embalse de Embarcadero.

La Hoz del Júcar, en la Manchuela, es una zona sorprendente que ofrece un paisaje muy pintoresco y con cañones fluviales y pueblos que dan la sensación de estar flotando. Una zona de contrastes con vegetación y grandes huertas en algunos tramos. En otros, el río es más sinuoso y genera bruscos meandros que pasan entre cañones.

Al norte de la Hoz del Júcar se sitúan las últimas estribaciones del Sistema Ibérico; al sur comienzan a repuntar las primeras alturas de la Cordillera Bética y, por último, al oeste se extienden las grandes llanuras manchegas. Un espacio de gran valor natural en el que, además, destaca la presencia de varias localidades con un importante papel en la historia de España e interesante arquitectura popular y monumentos como Alcalá del Júcar, Tolosa, Casas del Cerro, Jorquera…

Qué comer entre ruta y ruta

  • Zarajos: muy populares en la cocina de Cuenca, los zarajos —el intestino delgado del cordero enrollado en un palo– se consumen también en Madrid y tienen “primos” similares sin palo en Navarra y La Rioja, donde se conocen como embuchado, y en Aragón, como madejas. Los zarajos se suelen cocinar fritos o a la plancha.
  • Migas: el plato típico más famoso de Castilla-La Mancha. Llevan pequeños trozos de pan duro sofritos en aceite con ajos, torreznos, panceta, chorizo y pimentón. A menudo se acompañan con unas uvas blancas y un huevo frito en lo alto.
  • Gazpacho manchegoes un guiso caldoso (caliente) que se cocina con carne (conejo, pollo o perdiz) y cuyos ingredientes principales son trozos de torta cenceña manchega, un pan ácimo que se prepara sin levadura.
  • MorterueloGuadalajara, Albacete y, sobre todo, Cuenca son los responsables de la existencia de este plato de origen medieval. Sus ingredientes fundamentales son el hígado de cerdo y la carne de caza. Se cocina con pan desmigado o rallado y especias (canela y comino).
  • Alajúes uno de los dulces más típicos de Cuenca. Su ingrediente principal son las almendras, además de pan rallado y miel, aunque se pueden añadir piñones y nueces. Es una masa con miel, especias, pan rallado, pan tostado y frutos secos.