Croquetas de bacalao: receta casera
Si quieres saber cómo hacer una receta de croquetas de bacalao igual que las haría tu abuela, te contamos la receta tradicional de este sabroso plato.
Hoy comemos
Comparte
Las croquetas son un plato que te resuelve perfectamente una cena con una ensalada. Puedes prepararlas ya en porciones y congelarlas y así solo sacarlas para freírlas en un momento. Aunque las croquetas de bacalao son un clásico de Semana Santa, cualquier situación es buena para cocinar este crujiente y dorado bocado.
Aunque pienses que no te van a salir las croquetas de bacalao como las hace tu madre o tu abuela, te presentamos una receta infalible, fácil de hacer, incluso, para los ‘poco cocinillas’. Es cierto que la práctica ayuda, pero, aunque sea tu primera vez, seguro que te salen muy buenas.
Las croquetas de bacalao se pueden hacer con bacalao salado o con bacalao fresco, aunque, con éste último no quedan con el mismo sabor que con el salado. Para evitar tener que ponerlo a remojo, como poco, durante 30 horas, existe la opción de comprarlo desmigado.
Cómo hacer las auténticas croquetas de bacalao
Ingredientes (6 personas)
- 200 g de bacalao desmigado
- 1 cebolleta o cebolla
- 2 dientes de ajo
- 100 g de harina
- 1 l de leche
- 100 ml de aceite de oliva virgen extra (o 100 g de mantequilla)
- Sal
- Pimienta negra y nuez moscada (opcional)
- Perejil
- Para rebozar y freír:
- Harina
- 3 huevos batidos
- Pan rallado
- Aceite de oliva virgen extra
Elaboración:
1. En una sartén, pon a pochar con un chorro de aceite la cebolleta picada finamente. Luego, pica también finamente los dientes de ajo y añádelos. Cuando estén dorados agrega el bacalao desmigado y rehoga durante unos minutos.
2. Luego añade la harina y rehógalo todo bien durante unos minutos, ya que así evitaremos que la masa sepa a crudo. Después, vierte, poco a poco, la leche, pero sin dejar de remover. Sazona, pon la pimienta negra y la nuez moscada y cocina la bechamel a fuego medio durante 20 minutos aproximadamente, removiendo constantemente. Añade un poco de perejil picado y mezcla bien toda la bechamel.
3. Posteriormente, pasa la bechamel a una fuente y deja que se enfríe un poco. Para evitar que le salga costra, debes cubrirla con papel de plástico o untar la superficie con un poco de aceite.
4. Cuando la masa esté fría, haz pequeñas porciones y moldea las croquetas. Enharínalas, pásalas por huevo y pan rallado y fríelas en una sartén con abundante aceite caliente.
5. Cuando estén doradas, sácalas de la sartén y ponlas en un plato con papel de cocina para que absorba el exceso de aceite. Y ya están listas para servir.