Recetas originales para sorprender
La mayoría de personas tendemos a cocinar siempre de la misma forma. Pero, seguro que alguna vez han pensado en innovar, cambiar, o hacer aquella receta que pensabas que era imposible. No tienen por qué ser recetas complicadas, con algo de imaginación y unas pocas indicaciones podemos preparar platos originales y fáciles que nos sorprendan a nosotros mismos y a nuestros invitados.
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La mente humana es conservadora por naturaleza. El cambio asusta, desbarata e incomoda. Cuando hacemos algo de forma diferente, el cerebro recibe órdenes contradictorias, creando una sensación de desconcierto entre la costumbre y la propia novedad.
La propuesta es todo un desafío: dejar atrás las típicas formas de elaboración para cambiar el clásico filete empanado o la ensalada con tomate. Es decir, convertir las sencillas comidas de siempre en recetas de primer nivel, sin tener que hacer grandes esfuerzos. Transformar los platos cotidianos en recetas originales y sencillas de hacer. Para una cena con invitados, para esta navidad o para que los niños no se aburran, podemos preparar recetas sorprendentes en muy poco tiempo, y además, utilizando ingredientes sencillos como queso, arroz o huevo.
Por ejemplo, con la llegada del invierno el caldo de pollo es muy socorrido. Con unas alas y carcasas horneadas y luego llevadas a ebullición durante un par de horas, se consigue un caldo rico y consistente. ¿Y si se mezcla con flores de jazmín? Se trata de unir innovación y tradición con pequeños toques para crear recetas originales.
Y si se opta por preparar una sopa, ¿por qué acompañarla con los típicos fideos? Caldos con granos de cebada, trigo, centeno o espelta, con arroz salvaje o rojo, quinoa o mijo, avena entera o con legumbres, enriquecen mucho cualquier plato de cuchara y lo transforman en una receta muy original.
Otro de los ingredientes cotidianos en la cocina y al que apenas se le presta atención es el huevo. Sacar el máximo partido a este producto tan aparentemente sencillo resulta fácil si se valora su versatilidad a la hora de combinarse con otros alimentos. Una receta original sería preparar unos huevos revueltos con mantequilla, nata y un chorrito de leche y remover todo mientras se cocina al baño maría. De este modo se obtiene una textura increíblemente cremosa.
Se trata de unir innovación y tradición con pequeños toques.
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Y, ¿qué pasa con el típico filete empanado? Existen alternativas tan sorprendentes como sustituir el pan rallado por nachos, copos de maíz, copos de patata, frutos secos o semillas, aportándole unos matices muy interesantes. O, por qué no, mezclar el pan con queso, especias o hierbas aromáticas para elaborar un plato diferente. La cuestión es cambiar un poco la forma de hacer las cosas para que los platos caseros dejen de ser siempre lo mismo y se conviertan en recetas que sorprendan.
Del mismo modo, ¿cómo romper con el típico tándem lechuga-tomate? Darle una nueva vida a las ensaladas es facilísimo, solo hace falta un poco de imaginación en nuestra receta. El contraste entre texturas y sabores es un buen punto de partida que se puede conseguir con judías verdes, aguacate, pepino, brócoli, espárragos, puerros, calabaza o germen de trigo, entre otras opciones. Y para darle el toque final, los elementos crujientes son ideales. Nueces, anacardos, pipas de girasol, manzana o apio, entre otros hacen de una ensalada común, una ensalada de lo más original.
Atreveros a ir más allá, a cambiar el orden de los factores, a poner el arroz en el postre y el chocolate en la ensalada. Existen multitud de elementos preparar recetas originales y diferentes que sorprendan.
Veamos algunos ejemplos de recetas originales:
Ensalada de calabaza con rúcula.
Croquetas de flores de brócoli.
Copa de vino blanco aromatizado con piruleta de chocolate.