Temperatura de conservación de alimentos: ¿cuál es la adecuada?

Conocer la temperatura de conservación de los alimentos o descubrir qué alimentos hay que vigilar durante el verano son algunas de las cosas que nos pueden servir de gran ayuda para evitar las tan temidas intoxicaciones alimentarias. ¿Te interesa? Te lo contamos todo a continuación.

¿Cuál es la temperatura de conservación de alimentos adecuada?

El aumento de la temperatura puede acortar la vida de los alimentos que guardamos en nuestra cocina, no solo de los que conservamos en la despensa o fuera del frigorífico, sino también de aquellos que se encuentran en su interior. Y es que, con la llegada del calor, consumimos más alimentos frescos y abrimos más veces el frigorífico, lo que produce una pérdida de frío. Es por esto que, durante el verano, es necesario reducir su temperatura para que la comida se conserve en mejor estado. 

• Nevera: debe mantenerse entre 0 ºC y 7 ºC.
• Congelador: debe mantenerse alrededor de los -15 ºC.

3 tips para mantener en buen estado los alimentos en verano 

1. Realiza una limpieza general de la nevera y el congelador para eliminar posibles bacterias, al menos, una vez al mes.
2. Haz una compra responsable; es decir, compra aquello que vayas a consumir durante la semana. En verano es recomendable no acumular mucha comida en la nevera, dejar espacio entre ella al guardarla y, sobre todo,… fijarse en las fechas de caducidad.
3. Organiza de forma adecuada la nevera para mantener la temperatura de conservación de los alimentos: durante el verano no basta con regular la temperatura de este electrodoméstico, sino que hay que mantenerla.

• Conoce los productos que debes guardar en la nevera y los que no:
• Alimentos que deben permanecer en la nevera: frutas, verduras, carnes, pescados, huevos, lácteos, etc. ¡Ojo! Durante esta estación, se recomienda congelar la carne y el pescado, a no ser que los vayas a consumir rápidamente. 
• Alimentos que no debemos guardar en la nevera: platos calientes o recién cocinados (hay que dejar que se enfríen previamente), platos no cubiertos con papel de film o con cualquier tipo de protección y latas de conservas, entre otros. 
• Hay que tener en cuenta dónde guardamos los alimentos en la nevera y el congelador. Cada alimento tiene marcado su sitio en la nevera, debido a que cada uno tiene distintas necesidades térmicas. ¡Descúbrelas aquí! 
• No abrir la nevera continuamente: esto provoca que se pierda el frío, por lo que los productos se estropean antes, sobre todo aquellos que están situados en la parte interior de la puerta del frigorífico. 

 5 alimentos que debes vigilar durante el verano

1. Lácteos: durante el verano deben exponerse poco tiempo a la temperatura ambiente, ya que son propensos a contraer hongos, moho y bacterias, ¡incluso refrigerados!

2. Salsas y elaboraciones con huevo crudo: si los compramos ya elaborados, debemos consumirlos en poco tiempo. Si son caseros, es preferible desechar las sobras para evitar la tan temida salmonelosis. Por supuesto, también debemos tener cuidado con los huevos: descubre cómo detectar si un huevo está en mal estado aquí.

3. Marisco, moluscos y pescado: el marisco debe consumirse con la mayor brevedad posible y siempre debe tener su característico olor a mar. Si huele fuerte o te sabe a amoniaco, deséchalo de inmediato. 

4. Carne: al igual que el pescado, es preferible congelarla y consumirla posteriormente si no vamos a consumirla en seguida. Debemos tener especial cuidado con la carne de ave, como el pavo, el pato o el pollo.

5. Helados, horchata, batidos y granizados: son muy sensibles a las fluctuaciones de temperatura.