Trucos de belleza para mujeres de más de 50 años
¡No te pierdas los mejores tips de belleza para mujeres de más de 50 años! Maquillaje, rutina facial, skincare, cuidado e hidratación de la piel...
Salud y BELLEZA
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Los cuidados de la piel a partir de los 50 años tienen dos objetivos: mantener un aspecto fresco y saludable y ofrecer luminosidad al rostro. Incorpora estos cuidados faciales en tu rutina para pieles maduras y cuídate.
Rutina facial para pieles maduras: prepara tu piel antes del maquillaje
- Hidratación esencial: para mantener una piel radiante a cualquier edad es crucial una hidratación adecuada. Opta por cremas hidratantes ricas en ingredientes nutritivos como ácido hialurónico, vitaminas y antioxidantes. Aplícatelas dos veces al día y no olvides incluir el protector solar.
- Exfoliación suave: la exfoliación regular ayuda a eliminar las células muertas de la piel y estimula la renovación celular. Elige exfoliantes suaves y evita productos abrasivos que puedan irritar la piel. Dedica especial atención al cuello y al escote para mantener una apariencia uniforme.
- Cuidado específico: valora la incorporación de cremas específicas contra los signos de la edad. Busca productos con ingredientes como retinol, péptidos o vitamina C, que ayudan a estimular la producción de colágeno y a combatir los signos del envejecimiento.
- Cuidado nutritivo: con el paso del tiempo, el cabello puede volverse más frágil y propenso al daño. Utiliza champús y acondicionadores nutritivos, específicamente formulados para cabellos maduros.
- Estilo favorecedor: experimenta con cortes de cabello y peinados. Incorpora tonos cálidos y reflejos sutiles para dar dimensión y luminosidad a tu cabello. Encuentra el estilo que mejor se adapte a tu tipo de cabello y forma de rostro.
Ideas de maquillaje para pieles maduras
- Preparación: antes de aplicar el maquillaje, limpia e hidrata. Utiliza una crema hidratante nutritiva y una prebase para suavizar las líneas finas y crear una base uniforme para el maquillaje.
- Base de maquillaje ligera: evita las bases muy densas que puedan acentuar las arrugas y líneas de expresión. Aplícala con una brocha o una esponja y difumínala suavemente para obtener un acabado uniforme.
- Corrector e iluminador: un corrector de tono adecuado disimulará las ojeras y las manchas. Aplícalo con los dedos o con un pincel pequeño y difumina. Las zonas estratégicas a iluminar son el arco de las cejas, el hueso de los pómulos y el arco de Cupido.
- Sombras de ojos suaves: tonos neutros para dar profundidad a tus ojos sin acentuar las arrugas. Los marrones, beige y rosados son excelentes opciones. Aplica una sombra más clara en todo el párpado móvil y difumínala hacia el pliegue y una más oscura en el extremo exterior para darle definición.
- Delineado de ojos delicado: delineador en tonos oscuros para trazar una línea fina a lo largo de las pestañas superiores. Evita los delineados gruesos o excesivamente dramáticos, ya que pueden hacer que los ojos se vean más pequeños.
- Pestañas voluminosas: elige una máscara que no sea demasiado pesada y opta por aplicar varias capas ligeras en lugar de una sola capa espesa. Evitará que las pestañas se agrupen y les dará una apariencia más natural.
- Labios hidratados y definidos: opta por labiales hidratantes con tonos que complementen tu tono de piel y acabado cremoso o satinado. Para evitar que el labial se deslice, delinea con un perfilador del mismo tono antes de aplicar el color.
- Rubor sutil: los tonos suaves y naturales darán vida a tus mejillas. Aplícalo suavemente en las mejillas y difumínalo hacia las sienes. Ayudará a dar un aspecto juvenil y saludable a tu rostro.