Competencia vs cooperación. Educar para cooperar

La educación es importante y saber cómo impartirla a los más pequeños es fundamental, sobre todo cuando hablamos de cooperar o competir.

Cuidado infantil

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Durante la infancia es importante educar a nuestros hijos en valores, ya que con ellos sentamos las bases morales de aquellas personas que formarán el día de mañana. Esta disciplina trata de la transmisión de conductas y actitudes que introducen a los niños competencias como la tolerancia, el respeto, la inclusión, la diversidad, la paciencia o la generosidad, entre muchas otras.


Una de estas competencias es la importancia de educar en el trabajo en equipo o cooperativo, una forma de vida que cada día cobra más importancia entre nuestra sociedad ya sea en el colegio, en el trabajo, en la familia o entre nuestras amistades. A continuación te damos las claves para educar en esta disciplina. 

Diferencia entre cooperar y competir 

Entendemos que dos personas cooperan cuando intentan beneficiarse mutuamente del trabajo que realizan, ya sea en solitario, pero pensando en el bien del equipo, o trabajando conjuntamente; mientras que dos personas que compiten se esfuerzan por superar al otro, para la gloria de uno mismo o para conseguir algo que no quedará disponible para los demás. Por lo que, mientras que en la cooperación se comparten tanto los beneficios como las pérdidas de un trabajo común, la competencia conlleva una victoria solitaria y, en muchos casos, la destrucción conjunta a causa de un trabajo mal realizado por el ansia de poder.


“Todo el mundo habla de paz, pero nadie educa para la paz, la gente educa para la competencia y este es el principio de cualquier guerra. Cuando eduquemos para cooperar y ser solidarios unos con otros, ese día estaremos educando para la paz”. Maria Montessori.

La importancia de educar en la cooperación y la competencia saludable 

Educar en la cooperación no implica educar en el conformismo. Además de los beneficios que puede traernos un trabajo cooperativo o compartido, existe la llamada competencia saludable, que no es otra cosa que inculcar a los niños el llamado “espíritu de superación”: es decir, educar a nuestros hijos para no fijarse en el trabajo de los demás o para superar al prójimo, sino para superarse a sí mismos día a día, esforzándose por sacar el máximo partido a sus capacidades, tanto intelectuales como físicas o sociales. 

Cómo educar en la cooperación y la autosuperación 

  1. Da ejemplo: hasta cierta edad, los niños son como esponjas y aprenden mediante el ejemplo y las conductas que se dan en el seno del hogar. Si los papás cooperan con los demás o entre ellos, el niño tenderá a copiar estas conductas, las asumirá y, más tarde, las desarrollará en su vida diaria.
  2. Planifica en familia: una buena forma de educar en la cooperación es planificar rutinas y deberes del hogar juntos, donde cada miembro de la familia tenga una responsabilidad, y exponer el beneficio compartido de ese trabajo en equipo. 
  3. Educa mediante valores positivos: asocia el esfuerzo y el progreso a valores positivos y no a sentimientos de poder como “ser el mejor”, “ganar” o “perder”.
  4. Fomenta actitudes positivas y desinteresadas: fomenta actitudes de amabilidad, cooperación, trabajo en equipo y ayuda al prójimo. “Si ayudas desinteresadamente a los demás, ellos te ayudarán a ti cuando lo necesites”.
  5. No es necesario ganar para progresar: inculca que no es necesario ganar siempre, pero sí es necesario mejorar siempre y trabajar duro para crecer en todos los aspectos. Educa fijando objetivos progresivos y alcanzables para él o para ella. 
  6. Evita las comparaciones con los demás: no establezcas comparaciones entre quien gana o pierde, sino en los logros conseguidos por uno mismo. Es muy fácil caer en el “fíjate en fulanito: si él puede, tú también”. Este tipo de actitudes solo crea sentimientos de egoísmo, resentimiento, frustración y miedo al fracaso. 
  7. Todo problema es una oportunidad disfrazada: enseña que perder también es necesario para aprender a progresar en la vida y buscar nuevas estrategias de mejora y superación con uno mismo.