Pastelitos de boniato: receta casera

Los pastelitos de boniato son los protagonistas de una receta de carácter tradicional que, pese a los años que lleva entre nosotros, no ha pasado de moda ni mucho menos. Originarios de la Comunidad Valenciana, donde son especialmente habituales en Navidad, los también conocidos como pastissets de boniato son unos pasteles de textura suave, sabor sutil y aspecto rústico irresistibles. De ahí que en tierras valencianas sean un imprescindible en esta época del año.

Perfectos también para el otoño, estos dulces son ideales para tomar solos o acompañados. Además, algo especialmente positivo es que se pueden disfrutar recién hechos (cómo no), pero también templados o fríos. Es habitual encontrarlos en las sobremesas familiares, donde pueden endulzar cualquier charla, así como servirlos para acompañar un café, una infusión o una copita de licor. 

Para preparar unos buenos pastissets de boniato caseros solo tenemos que seguir los siguientes pasos. Y una buena noticia para los menos cocinillas: son bastante fáciles de elaborar. Descubramos ya cuál es la mejor receta de pastel de boniato. ¡Vamos allá!

Ingredientes de los pastelitos de boniato

• 2 boniatos grandes
• azúcar, el mismo peso que los boniatos después de hervir
• 1 rama de canela
• agua
• corteza de limón sin la parte blanca

Para preparar la masa

• 1 medida de  cazalla o anís seco
• 1 medida de aceite de girasol
• 1 medida de manteca de cerdo
• 1 medida de azúcar
• 2 yemas de huevo
• harina de trigo la que admita la masa

Para decorar los pasteles

• 2 claras de huevo a punto de nieve
• azúcar (para espolvorear por encima)

Receta de los pastelitos de boniato

Los pastelitos de boniato de València (típicos a más no poder) se caracterizan fundamentalmente por llevar una deliciosa crema de boniato que se envuelve en una masa donde el anís aporta un toque muy peculiar. Lo recomendable es preparar el relleno, esto es, la crema de boniato, el día anterior, porque así la tendremos totalmente fría. Dicho esto, ¡empecemos!

Comenzaremos preparando la crema de boniato. Para ello, pelaremos dos boniatos  y los trocearemos en piezas que sean similares en tamaño. Después, los coceremos en una cazuela con agua y acompañados de una rama de canela y la corteza de limón. Los dejaremos cocer durante unos 10-15 minutos hasta que nuestros trozos de boniato estén bien hechos. 

A continuación, escurriremos los boniatos con la ayuda de un colador. Después, los pasaremos a un recipiente (a poder ser amplio y hondo) que nos permita machacarlos cómodamente con un tenedor. Añadiremos el azúcar, un poco de agua, lo integraremos todo bien y lo llevamos a ebullición sin parar de remover para que no se nos quede pegada nuestra confitura. En este punto dejaremos enfriar para que cojan una consistencia óptima. Y con esto ya tendremos el relleno.

Pero, ¿y la masa? Para hacerla, mezclaremos la manteca de cerdo, el aceite de girasol, la cazalla o anís seco, el azúcar y las dos yemas de huevo. Luego, iremos incorporando la harina poco a poco, hasta que "admita", como se dice en repostería. Para ello, iremos removiéndolo todo hasta que la masa quede con cuerpo. No olvidemos, además, que nuestras manos serán la mejor opción para hacer la masa. Cuando tenga un aspecto consistente, la dejaremos reposar durante unos 30 minutos. 

Mientras ponemos a punto de nieve las dos claras que hemos separado de las yemas y reservamos. Nos van a servir para decorar los pastelitos de boniato. 

Llega ahora el paso de estirar la masa. Para ello, nos ayudaremos con un rodillo. Haremos una masa de medio centímetro de grosor y la cortaremos con un cortapastas en círculos de 9 o 10 centímetros. Para aprovechar toda la masa posible, retiraremos la que nos ha sobrado, volveremos a amasarla y la estiraremos para poder hacer nuevos círculos. 

Rellenaremos estos círculos de masa con la crema de boniato (ya fría). Tengamos en cuenta que los vamos a doblar por la mitad, así que no debemos sobrecargarlos en exceso. Después, presionaremos los bordes para que no se abran en el horno, que podemos ir calentando con calor arriba y abajo a 180 ºC. 

Colocaremos los pasteles sobre una bandeja de horno cubierta con papel vegetal y les añadiremos las claras por encima. Por último, los espolvorearemos con azúcar e introduciremos los pastelitos de boniato en el horno. Dejaremos que se cuezan durante unos 15 minutos o hasta que los veamos dorados, y esperaremos unos 10 minutos para que se atemperen antes de retirarlos. 

Otra variante que podemos tener en cuenta es la de los pastelitos de boniato y almendra. En este caso, podemos añadir almendra molida cuando agreguemos la ralladura de limón si somos especialmente amantes de este fruto seco. Ya solo queda elegir tu versión favorita de esta receta y ponerte con ella.